Esto es lo que quiero

"Cada uno debe quedarse como estaba cuando creyó en Cristo. Si eras esclavo, no te preocupes. Pero si puedes conseguir tu libertad, aprovecha la oportunidad. Porque si alguien es esclavo y cree en el Señor Jesús, él le dará la libertad. Del mismo modo, el que era libre se convierte en esclavo del Señor. Cuando Dios nos hizo libres por medio de la muerte de Cristo, pagó un precio muy alto. Por eso, no debemos hacernos esclavos de nadie. Ante Dios, cada uno debe quedarse como estaba cuando creyó en Cristo." (1 Co 7:20-24 TLA)


El hecho de que una persona llegue a ser cristiana no cambia su status en la sociedad. En los versículos 17-24 Pablo les dice a los corintios que no traten de «deshacer» su situación, sino que se apeguen a su llamamiento y permitan que Cristo haga los cambios a su manera y en su tiempo. (WEO-ES-C)


Las reglas del cristianismo alcanzan a toda condición; el hombre puede vivir en todo estado haciendo que ese estado tenga prestigio. Deber de todo cristiano es contentarse con su posición, y conducirse en su rango y lugar como corresponde al cristiano. Nuestro consuelo y felicidad dependen de lo que somos para Cristo, no de lo que somos en el mundo. Ningún hombre debe pensar en hacer de su fe o religión un argumento para transgredir obligaciones civiles o naturales. Debe quedar contento y callado en la condición en que haya sido puesto por la providencia divina. (CMH-C)


Las reglas del cristianismo alcanzan a toda condición; el hombre puede vivir en todo estado haciendo que ese estado tenga prestigio. Deber de todo cristiano es contentarse con su posición, y conducirse en su rango y lugar como corresponde al cristiano. Nuestro consuelo y felicidad dependen de lo que somos para Cristo, no de lo que somos en el mundo. Ningún hombre debe pensar en hacer de su fe o religión un argumento para transgredir obligaciones civiles o naturales. Debe quedar contento y callado en la condición en que haya sido puesto por la providencia divina. (CMH-C)


PODEMOS ESTAR SEGUROS DE QUE CONOCEMOS A DIOS SI OBEDECEMOS SUS MANDAMIENTOS. EL QUE DICE: «YO LO CONOZCO », PERO NO OBEDECE SUS MANDAMIENTOS, ES UN MENTIROSO Y LA VERDAD NO ESTÁ EN ÉL. (1 Jn 2:3-4 RV'20)